Según un informe publicado hoy por Consumer, mientras el resto de ciudades analizadas destinan casi un 4% del presupuesto general anual al deporte (46,6 euros de media por habitante), en Málaga la cantidad total es de 11,6 millones de euros (20 euros por habitante), lo que supone un 1,5%.
Sin embargo, pese a que el presupuesto destinado a recursos deportivos va en descenso (en 2005 representaba un 1,9%), ha mejorado la dotación de instalaciones acuáticas con una piscina por cada 37.890 habitantes (en 2006 era una por cada 91.290), pero lejos aún de la media nacional de una piscina por cada 19.500 habitantes.
También han aumentado las pistas deportivas: ahora tenemos un polideportivo cubierto por cada 81.190 malagueños (hace cuatro años la proporción era de uno por cada 109.550 habitantes), una pista de atletismo por cada 113.660 residentes (en 2006 era una por cada 547.730) y un campo de fútbol por cada 12.630 habitantes (hace cuatro años era uno por cada 23.810 malagueños). Pero sólo en fútbol superamos sobradamente la media de España que está en un campo por cada 17.700 habitantes.
Estadio de Atletismo |
Aunque el informe no habla del precio medio por el uso de instalaciones en la capital de la Costa del Sol, en esto también superamos ampliamente a la media nacional. Los 83 euros al año que pagan en Vitoria aquí no dan ni para 2 mensualidades. En Málaga cada músculo vale su peso en oro.
La fórmula de la capital para construir y gestionar los centros deportivos (motivo del gran crecimiento sin apenas inversión) es ceder el suelo o la gestión a empresas privadas, cuyo objetivo es lograr el mayor beneficio alcanzable en el menor tiempo posible; ayudando, de paso, a adelgazar nuestro bolsillo más rápido que nuestro cuerpo. Sin esa fórmula probablemente no tendríamos ni una sola piscina municipal, ni muchos gimnasios y polideportivos.
La fórmula de la capital para construir y gestionar los centros deportivos (motivo del gran crecimiento sin apenas inversión) es ceder el suelo o la gestión a empresas privadas, cuyo objetivo es lograr el mayor beneficio alcanzable en el menor tiempo posible; ayudando, de paso, a adelgazar nuestro bolsillo más rápido que nuestro cuerpo. Sin esa fórmula probablemente no tendríamos ni una sola piscina municipal, ni muchos gimnasios y polideportivos.
Quizás por eso el informe comienza con una frase que deberían apuntarse muchos concejales de deportes, cuyo esfuerzo se ha centrado durante demasiados años en atraer a la ciudad grandes eventos deportivos, olvidando su verdadera misión. "El deporte no sólo se ve, también se practica". De no entender esta frase tendrían que cambiar su cargo por el de concejales de espectáculos. Lo que pasa es que, salvo en algunos deportes como el fútbol, sin práctica no hay afición, sin afición no hay público y sin público no hay espectáculo. Entonces, ¿qué tal concejales de espectáculos y empresas deportivas?. Si, parece que funciona.
Rafa Muñoz celebrando el récord del mundo logrado en Málaga |
FUENTE: http://revista.consumer.es/web/es/20100901/actualidad/tema_de_portada/75660.php